Xyloba Junior Maxi: música, movimiento y construcción viva

Hay materiales que abren el juego sin pedir nada a cambio. Xyloba Junior Maxi es uno de ellos. Una pista de canicas que suena, que se transforma y que acompaña a la infancia a descubrir el movimiento desde la calma y la curiosidad.

Cada pieza está fabricada a mano por Stiftung Weizenkorn, una fundación suiza que desde hace décadas ofrece empleo y acompañamiento a personas con diversidad funcional. Este origen se nota en la delicadeza, la precisión y la humanidad que hay detrás de cada bloque.

El set incluye rampas, bloques y módulos musicales que generan notas reales al pasar la bola. La infancia anticipa, escucha, observa… y vuelve a intentarlo. Las pistas se construyen con estabilidad, y las bolas —grandes y seguras— ruedan lentamente mostrando todo su recorrido, lo que favorece la concentración, la continuidad del juego y la relación causa-efecto.

A partir de ahí todo fluye: primero recorridos simples y, con el tiempo, estructuras más complejas que nacen de su propio deseo de explorar. Es un material que crece con cada criatura, que invita a la autonomía y que llena el espacio de pequeñas melodías que sorprenden una y otra vez.

Por qué lo elegimos para la juguetería viva:

• combina música y movimiento de forma natural

• respeta los ritmos de la infancia

• es seguro, duradero y precioso

• favorece la construcción libre

• pertenece a una marca con un fuerte compromiso social

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Xyloba Junior Maxi es una invitación a mirar, escuchar y crear. Una propuesta que acompaña sin dirigir y que convierte cada bola que rueda en un pequeño descubrimiento.